miércoles, 30 de enero de 2013

CONFECIONA UN TERRERO.

Cómo confeccionar un terrero
Algunas veces es complicado dar el mejor bienestar a nuestros pájaros porque nos falta espacio. En estas líneas aprenderemos cómo hacer un terrero adaptado a un piso que proporcione confort a los reclamos y nos facilite mantener su higiene y limpieza.
9147 lecturas
Llegado el tiempo de pelecha de nuestros pájaros, donde mejor se encuentran, sin duda alguna, es en sus correspondientes terreros. La situación particular de cada uno de nosotros hace que tengamos que adaptarnos y adaptar éstos al lugar donde vivimos habitualmente. Por ello, cada jaulero intenta conseguir que nuestros compañeros de fatiga, nuestros queridos reclamos, se sientan lo mejor posible y, a la vez, que tengan un perfecto pelecho, pues en ello va su salud y con ella su posterior trabajo en el tanto.
Hay que evitar el posible olor de sus excrementos, así como ensuciar lo mínimo con la tierra y el polvo
Mi situación, en concreto, al vivir en piso, como posiblemente le pasará a más de un aficionado, hace que tenga que adaptar mis terreros al espacio disponible, y cómo no, evitar en lo posible el olor de sus excrementos, así como el ensuciar lo imprescindible con la tierra y el polvo.
Por todo lo anterior, recomiendo construir los terreros con las medidas que a continuación detallaré, necesarias para facilitar su limpieza, y dentro de ellas, poder ofrecer la máxima comodidad a mis pájaros.

Cajón para recoger los excrementos y para la tierra. Se separa del pájaro mediante una tela metálica electrosoldada que se retira cuando ponemos tierra al reclamo.
El conjunto al que me referiré está compuesto de un módulo con tres compartimentos iguales, y sus medidas, en este caso, son 25 centímetros de ancho, 30 centímetros de fondo y 35 centímetros de alto. Para el frontal he utilizado un marco de 27 centímetros de alto y 25 centímetros de ancho, con perfiles de 1,5x2 centímetros, siendo la separación entre barrotes de 4,5 centímetros, que son redondos, de madera, de 1 centímetro de diámetro. La puerta es de 9,5x13,5 centímetros y se sujeta a la caja mediante tornillos pasantes embutidos.

En los comederos en su parte superior se ha colocado una tela metálica para evitar que los pájaros urbanitas accedan a la comida, evitando así la transmisión de enfermedades.
La separación del pájaro con el cajón se realiza mediante una base de tela metálica electrosoldada, la cual impide que esté en contacto directo con los excrementos, a la vez que facilita el que cuando le ponemos tierra únicamente hay que quitarla para que el pájaro acceda directamente a ella; para retirar el cajón de la tierra, lo haremos a la inversa.

Contra el ‘curioseo’ es conveniente instalar una placa de madera para impedir que los reclamos puedan molestar a su congénere vecino de terrero.
Para evitar el sobrante de tierra, procedente de revolcarse, quede en la base, con lo que costaría trabajo deslizar el cajón, se le ha dejado libre y así únicamente tiene correderas para entrar y salir, con lo que evitamos la acumulación de la citada tierra, a la vez que facilitamos el trabajo de quitarla, consiguiéndose por este sistema la limpieza eficaz del compartimiento. Si quitamos el cajón y la malla metálica, ya quedaría libre por la parte inferior.

Corredera para cajonera. Se han utilizado listones de 2x1 centímetros en ambos laterales, 3x1 cm los dos interiores y para separar los compartimentos otro de 3x1 centímetros.
Para la corredera se utilizan listones de 2x1 centímetros los dos laterales, 3x1 centímetros los dos interiores y para mantener la separación de los compartimentos, un listón de 3x1 centímetros. El cajón para la tierra tiene unas medidas de 25x30x6 centímetros.
Los comederos van cogidos a la puesta mediante alcayatas, sus dimensiones son 9x6,5 centímetros y en la parte superior se le ha colocado una tela metálica electrosoldada de 0,5 centímetros de grosor. De esta manera, evitamos que pueda comer los gorriones —u otro tipo de pájaros que habitan las ciudades— y, al tiempo, evitamos una posible transmisión de enfermedades a nuestros reclamos.

Detalle del hueco dejado para colocar uno de los tres terreros que lleva el conjunto, con indicación de las medidas: 30 centímetros de fondo por 35 de alto por 25 de ancho.
Para el acople de los bebederos, al ser la separación de los barrones de 4 centímetros y no poder adaptar el bebedero, se le ha reducido mediante un artilugio construido con alambre. Para evitar que el pájaro lo pueda tirar al suelo al golpearlo, se le ha puesto una madera simulando la continuación del bebedero. En la parte superior de dicha madera se ha montado una base y a ésta se le ha acoplado una lija gruesa para conseguir que puedan afilarse el pico, ya que no se le ha puesto piedra para evitar las molestias que le originaría en el interior, debido al reducido espacio. Para su transporte se le ha abierto en el lateral una hendidura acanalada para que entren los dedos de la mano y así poder moverlos con facilidad.

Puerta del terrero, en la que podemos apreciar la lija para que se afilen el pico, un adaptador para sujetar el bebedero y una puerta más pequeña móvil donde acoplar el comedero.
Para facilitar la limpieza general una vez terminada la pelecha, el armazón está anclado con tornillos embutidos en lugar de encolado, con lo que se desmonta fácilmente consiguiendo solventar que los piojuelos puedan alojados en las uniones del armazón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario